Para el Gobierno esto es logro de su plan de marketing internacional, fijando al turismo como un sector estratégico para recuperar el crecimiento del país.

Voceros del ministerio de Turismo indican que la estrategia se ha basado en tres razones: el posicionamiento y la promoción desarrollada en las ciudades fronterizas, el aumento de conectividad y la favorable situación bancaria.

Se realza el valor de diversas actividades y atractivos turísticos chilenos a través de un programa insignia a largo plazo llamado “Transforma Turismo”, para ser aprovechados como imán para el visitante. Los argentinos son el primer grupo clientelar, pues fueron 2,9 millones los que pasaron la frontera para llegar al territorio del país vecino.

Este avance chileno nos debe hacer meditar a los ecuatorianos sobre el mejor aprovechamiento de las bellezas  de nuestra patria, mucho más ahora que España ha detectado oportunidades de negocio en el sector turístico ecuatoriano, aparentemente convertido en la tercera fuente de ingresos no petroleros del país.

De acuerdo a un diario nacional guayaquileño, para el ICEX -organismo español de comercio exterior- el factor turismo apunta a ser puntal en el mejoramiento de las finanzas ecuatorianas, en especial en estos tiempos cuando la situación económica del país está pataleando por varios factores, agravados por el terremoto del 16 de abril del año pasado.

El organismo internacional indica que en el 2014 hubo incremento de viajes en un 15 %, “sin precedentes”, agregando que en el 2015 Ecuador alcanzó un 2,1 del PIB ($ 2,1 millones) “y se espera que crezca un 4,1% en los próximos años, hasta alcanzar el 2,3 % del PIB en el 2016 (3.200 millones)”.

Y creemos que las condiciones están facilitadas con el avance propagandístico iniciado con el fastuoso programa “All You Need is Ecuador”, iniciado en un primer capítulo en el 2014, que oficialmente, se dijo, aumentó el 14 % de visitantes con respecto al 2013 y generó ingresos por alrededor de $ 1.500 millones.

Una segunda etapa fue encumbrada en julio del 2016, de la que no hay aún una información oficial completa de sus resultados, pero la ICEX ha señalado que a Ecuador ingresó $ 709,9 millones en el primer semestre del 2016 por concepto del turismo.

Con todas estas cifras y posibilidades de efectividad, dable es que se arranque con mayores, calculados e identificados objetivos en la carrera de la industria sin chimenea, esperándose que se abra el abanico a nuevas ofertas de ignoradas localidades de las tres regiones del Ecuador continental.