En entrevista con El Diario habló de este nuevo proyecto, metas, su vida y mucho más.

Súper feliz por haberme integrado al equipo de ‘Las Mañanitas’. 

La verdad es que todos los que trabajamos en este espacio somos una familia hermosa y se han portado súper lindo conmigo.

Como siempre digo, mi objetivo aquí es poner un granito de arena, aportando en todo lo que puedo, aprendiendo siempre. Estoy feliz por esto. 

La verdad es que ha sido maravillosa y estamos creciendo más. Siempre he dicho que la televisión a mi me ha gustado como carrera, no para algo mediático. De hecho por ello me ha gustado mantener mi vida personal, en bajo perfil. La televisión te da muchas oportunidades, super bonitas. Ese cariño de la gente es algo que llena mucho, pero siempre he dicho que todo eso solo te compromete para seguir trabajando con muchísimo amor y muchísimo cariño.  

No, para nada. Me doy tiempo para ser madre, para estar con mi hijo. 

Mi día empieza a las 06h00 cuando me levanto para preparar el desayuno, después paso dejando en la escuela a mi hijo y voy al canal. Creo que soy muy joven y por ello es que tengo todas las energías para trabajar, para cumplir diferentes roles en mi vida y eso me da mucho ánimo. Tengo un motivo especial que es mi hijo, que me hace levantarme cada día con una sonrisa. 

He aprendido a dejar todo en las manos de Dios. Yo estoy súper comprometida con mi trabajo y con mi vida en general. Cada día busco ser mejor persona de lo que fui el día anterior y nada. Por lo pronto, en cuanto a lo laboral quiero continuar en Gama. Sé que se vienen varios proyectos para este canal. Así que en eso estamos.  

Como persona, una chica súper sencilla y no tengo complicación alguna. Me gusta comer de todo, estar siempre alegre, de buen ánimo. Me encanta escuchar música y cantar.

Tengo 23 años, así que creo que todo lo que dije va justamente de la mano con mi edad y con mi manera de ser.  

Me pusieron así porque dicen que soy muy dulce. Este distintivo me lo dio el director de contenido del programa ‘Te Tomaste La Noche’. Dijo “bueno, hay que bautizarla con un nombre con la que todos la identifiquen”, y te cuento que de pronto todos se olvidaron que mi nombre es Alejandra y ahora me llaman ‘La Caramelo’.