El cadáver del manabita fue hallado la noche del miércoles en un terreno baldío a un costado de la vía Esmeraldas-Atacames con cinco disparos.
La mala noticia llegó a los familiares la madrugada del jueves, cuando los policías, junto con un amigo de la víctima, fueron hasta el departamento que arrendaba con su pareja Ana R. y le informaron de su muerte.