Este trabajo estuvo a cargo de personal de la Empresa Pública Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Portoviejo (EPMAPAP),  y se hizo en las calles céntricas como la Rocafuerte, 10 de Agosto y el sector de las Cinco Esquinas.

Flor Castro dijo que los vehículos, al caer en los huecos que tienen varios centímetros de profundidad, causan la vibración de las viviendas aledañas, alterando la tranquilidad de quienes ya superaron el susto por el terremoto.

“Deben nivelar el suelo”, precisó.

Para el morador Walter Benítez los huecos representan un riesgo permanente para los transeúntes y en especial para los motociclistas, considerando que dichos vehículos pierden el equilibrio con facilidad. Además las calles están a oscuras, lo que duplica el peligro.

“Espero que tomen acciones antes de que una persona pierda la vida”, citó.

Acciones. Frank Mendoza, jefe de operaciones de la EPMAPAP, dijo que contrataron a una compañía que tiene un equipo especial para la búsqueda de pozos y tapas de válvulas que están perdidas debajo del asfalto por varios años. 

Sin embargo, tras la búsqueda y limpieza quedó un desnivel considerable, el cual será superado en los próximos 15 días. “Seguimos un proceso para proceder con la obra”, dijo.

Según el funcionario, el problema será superado y pidió paciencia a conductores y peatones por los problemas causados.