A ellos se suman Anderson Ordóñez y Ely Esterilla, que también quedaron descar­tados por lesiones. 

El estratega canario Gui­llermo Almada tuvo así que armar un rompecabezas du­rante la semana de entrena­mientos. 

El uruguayo lamentó las cin­co bajas de su equipo, prin­cipalmente porque atravie­san por una racha de cinco victorias consecutivas. 

Tuvo que recomponer su defensa en un 50% y la tota­lidad de su bloque ofensivo. Eso también lo llevó a reto­car su línea de volantes. Bar­celona es el equipo que más goles marcó y que menos tantos recibió en esta segun­da etapa. “Será un partido difícil, más que nada con todas las ausencias”, men­cionó Almada, cuando se le consultó sobre la prepara­ción para el duelo ante los militares. 

Hoy repetirá el bloque de­fensivo que utilizó ante De­portivo Cuenca el pasado domingo. 

En el centro de la zaga juga­rán Javier Arreaga -su tercer partido del año- y Gabriel Marques, que regresa al puesto que ocupó el año pa­sado. Marques actúa como volante central este año, y al bajar a la zaga, su puesto sería ocupado por el expe­rimentado Oswaldo Minda, quien acompañará a Matías Oyola. En la delantera usa­ría una dupla inédita, ante la ausencia de Díaz y Álvez. Ubicaría a Christian Alemán y Marcos Caicedo. Almada cree que esta pareja tiene características similares a las que muestra la dupla ti­tular. Los amarillos buscan así una victoria que los man­tenga tranquilamente en la cima de la que son dueños con 24 puntos. 

EL RIVAL. El Nacional quiere dar pelea. Por ahora el cuadro rojo es quinto en la tabla con 15 puntos. 

Christian Lara, figura mili­tar, reflexionó que “sí es po­sible” vencer en el estadio Monumental para seguir con ese sueño de ganar la etapa y jugar la final ante Barcelona. Mas dejó en cla­ro que el club del Astillero es el mejor equipo del tor­neo, “porque ganó la pri­mera etapa y ahora sigue de líder”.