Esta es solo una posibilidad de tantas que maneja José Ramón Moreira, propietario. 

Él anunció esta propuesta para dejar en claro que Alikán volverá, que será reconstruido.  

El almacén se ubica dentro de la “zona cero” en Tarqui. El terremoto debilitó las estructuras. Su demolición empezó hace más de una semana.

 Moreira aclaró que no se marchará de lo que un día fue el corazón comercial de Manta. Dijo que tiene varios proyectos, entre ellos construir la fábrica, ya que uno de sus hijos se ha dedicado por varios años a fabricar la cerveza artesanal Umiña. Él cree que esta sería una buena opción, ya que la bebida es 100 % mantense. 

Incluso este producto ya se expuso en una rueda de negocios que se efectuó hace varios días en la ciudad, y, además, ya se vende en algunos locales de Guayaquil y Quito, se informó.  

Sin embargo, la decisión final se tomará después.  

“Alikán no desaparecerá. Tenemos algunas proyecciones para continuar aquí. Y si podemos crecer más que antes, lo haremos”, enfatizó Moreira. 

Moreira lleva más de 50 años en el comercio. Hace unos 40 construyó el almacén donde vendía artículos varios. Empezó en el negocio vendiendo discos musicales de los antiguos, luego pasó a vender trofeos, y la venta de uniformes escolares fue su fuerte. 

El almacén creció con el pasar del tiempo.  

Moreira no piensa dejar Tarqui. Espera que el Comité de Reconstrucción creado por el Gobierno realice una “verdadera regeneración” en la zona. 

Él cree que la tragedia es una excelente oportunidad para mejorar Tarqui. 

Recomendó que se haga un trabajo íntegro: cambio de toda la red de alcantarillado, soterramiento eléctrico, mejoramiento de calles, entre otras obras.