Después, aproximadamente a las 10h00, se dio inicio a la Misa Campal por parte del párroco Eneas Mauri, quien recordó que el 2016 es el Año de la Misericordia. 

La eucaristía se efectuó en las afueras del templo religioso. Una marea humana copó las inmediaciones del parque central y las calles Carlos Aray y Vicente Rocafuerte, en la ciudad manabita.

Procesión. Luego se realizó la procesión de la Virgen del Carmen, por las calles centrales de la ciudad, con el acompañamiento de sus creyentes, que llegaron desde diferentes sectores de El Carmen que en su mayoría agradecía por las bondades recibidas. 

El clima se presentó frío, favorable para los feligreses en la caminata.

Isabel Minaya, de 39 años, creyente de la Virgen del Carmen, indicó que cada año es parte de la manifestación. 

“Por estos días, en que vivimos momentos difíciles, debemos ser agradecidos por estar con vida”, dijo la creyente.

Lorenzo Vargas (55) llegó desde la zona rural para rendir honores a la patrona del cantón manabita.

Él comentó que asistió a la procesión “para pedir por nuestra provincia, por la compleja situación que pasa ante los fenómenos naturales. Las inundaciones y el terremoto nos golpearon fuerte este año, pero estamos saliendo adelante con la bendición y el cuidado de nuestra patrona”, manifestó. 

Agregó que “nuestro cantón sufrió también por el terremoto, pero a diferencia de otras ciudades estamos mejor, aunque duele la muerte de nuestros hermanos”.

La procesión terminó pasado el mediodía en la Iglesia Central, en donde se dieron cantos en honor a ella.