Detalló que el ingreso de estas empresas de buses se dio hace un mes. 

El motivo fue porque sus oficinas se encontraban en la zona cero de Portoviejo y por lo tanto era muy difícil laborar. 

Indicó que aunque fue una decisión emergente, podría llegar a convertirse en permanente. 

Esto debido a la reforma al Reglamento de Transporte Público Interprovincial de Pasajeros que realizó la Agencia Nacional de Tránsito (ANT), que se dio en años anteriores. 

Allí se determina que ‘‘queda prohibida la instalación de terminales terrestres privadas, así como el ingreso y salida de unidades de transporte de pasajeros interprovincial en lugares no autorizados por la ANT’’.

Sin embargo no se había cumplido.

“Esto no se hizo en su momento porque se esperaba que la ANT dijera que la terminal estaba en capacidad de recibir estas operadoras”, indicó.

Agregó Pazmiño que el ingreso de estas cooperativas a la terminal no resulta incómodo, pues esta sí cuenta con espacios disponibles. 

“Cada cooperativa utiliza su andén. Además las interprovinciales viajan por lo general por la noche. A esa hora no hay congestión de buses”, indicó el presidente encargado.

Ventas. Verónica Pico, jefa de oficina de Panamericana, indicó que la decisión de entrar a ls terminal se dio porque estaban ubicados en el centro y por lo tanto es considerado zona cero. 

“Pero ya teníamos desde antes planeado venir”, dijo. 

Asimismo recalcó que desde que están en la terminal terrestre la demanda de pasajeros ha aumentado. 

“Antes vendíamos 20 pasajes. Ahora vendemos hasta 30 pasajes. Hemos tenido que ampliar los cupos ya que los compartíamos con las oficinas de Manta”, comentó. 

Agregó que es cosa de ayer que los buses viajen desde Portoviejo a Quito vacíos. 

“En los días malos hasta ocho personas se van. Antes había días en que no iba nadie”, manifestó Pico. 

Detalló que los precios de los boletos no han aumentado. 

Por ejemplo, un pasaje a Quito se mantiene en 11 dólares.