El gobernador de Minnesota, Mark Dayton, pidió ayer al Gobierno de EE.UU. que se haga cargo de la investigación de la muerte de Philando Castile a manos de la Policía, un nuevo episodio de violencia que tensa la relación entre las fuerzas del orden y las minorías del país.
“He pedido al Departamento de Justicia que empiece una investigación federal e independiente sobre este asunto”, indicó el gobernador en un comunicado, en el que lamenta la muerte del afroamericano a manos de dos agentes.