Pavimentación de las calles, dotación de agua potable a la ciudadela Alborada y mejoramiento del alcantarillado que es deficiente en algunos sectores, fueron los pedidos puntuales que la parroquia Simón Bolívar hizo al alcalde de Portoviejo, Agustín Casanova, en la sesión solemne por los 10 años de creación.