En Ecuador está vigente el desorden en todos los ámbitos, no se respeta a la vida humana mucho menos la vida de los seres inocentes; existe violencia, abuso, maltrato y castigos crueles contra los animales domésticos y silvestres; uno de los que más sufren maltratos y castigos es el perro e incluso es echado a las calles por sus propios dueños; en donde los animalitos padecen hambre, sed, frío y enfermedades que los torturan hasta la muerte.
El perro es el animalito más entendible de entre todos los animales de la tierra, obediente, cariñoso y hasta inteligente por que aprende todo cuanto se le enseña; sin embargo es víctima de brutales acciones que, quizás, por desconocimiento de la importancia que tienen en nuestro entorno se cometen contra ellos; en nuestro país hasta el día de hoy no tenemos ley que ampare a los animales; algunas especies como por ejemplo, guatusos, guantas, venados y otros están siendo exterminados por cazadores inescrupulosos, muchos de ellos tienen permiso del Ministerio del Medio Ambiente; el crimen organizado contra la naturaleza es un desafío brutal en cuanto a la tala de árboles y a la destrucción de los bosques naturales que son el hábitat de los animales. Se hace urgente frenar tanto abuso y daño que se está ocasionando a la vida misma.
Ante esta preocupante realidad, formulo un llamamiento a las personas amigas de los animales y de la naturaleza, para unificar esfuerzos y voluntades, para exigir que en la Asamblea Constituyente se consideren Leyes en beneficio de los animales domésticos y silvestres lo cual ayudará a su conservación, las personas interesadas en unirse a esta causa pueden escribir al correo electrónico
[email protected] o comunicarse al teléfono 2602153 – 086234165 – 091108688 o enviar comunicación a la dirección 10 de Agosto y Santistevan, Jipijapa.
Por la inmensa labor patriótica y humana que se efectúe a favor de los seres inocentes les anticipo mis sinceros agradecimientos.
Atentamente,
Wilton Valdiviezo
INTEGRANTE VOLUNTARIO
PROTECCIÓN ANIMAL ECUADOR
CAPÍTULO MANABÍ