El denunciante, de 50 años, asegura que su hermano adoptivo, Gaspar Figueroa, le disparó con el fin de terminar con su vida y quitarle la parte de herencia que le dejó su padrastro al morir. Agregó que su madre, Rosa América Ponce, y su hermanastra, Telma Figueroa están en complicidad con el agresor. El hecho se registró a las 14h00 en la vía Las Mercedes, parroquia Sixto Durán Ballén, en el cantón 24 de Mayo, a 500 metros de su vivienda. “Yo caminaba a mi casa en compañía de mis dos hijos menores cuando Gaspar me salió al paso y empezó a disparar”. Loor mencionó que su madre y hermana fueron testigos de lo sucedido, pero no hicieron nada para impedir la agresión. “Más bien ellas le decía que me matara”. La víctima tiene huellas de perdigones en el tórax y el brazo izquierdo. Ingresó a emergencias del hospital del IESS, la noche del jueves y permanecerá por varios días en observación. Líos por tierra Segundo Loor cuenta que desde muy joven trabajó la tierra que ahora está en disputa entre él y sus hermanastros. El terreno le pertenecía a su padrastro, quien al fallecer lo dividió como herencia. Pero nadie quedó conforme con la parte que les tocó. Loor no descarta denunciar a sus familiares porque teme por la vida de su esposa e hijos.