La víctima fue identificada como María Asunción Cedeño Mendoza, quien se encontraba sola al momento en que las llamas se apoderaron de su casa, elaborada a base a caña guadúa.

ALERTARON. El humo alertó a los moradores del sector de que algo no estaba bien, y al mirar hacia la casa de María Cedeño notaron que salían llamas  de las paredes de caña. Ulpiano Cedeño, yerno de la ahora occisa, explicó que al escuchar los gritos de la mujer avisaron inmediatamente a los gendarmes de la UPC del sector, localizada a unos cien metros.

Los polícias no dudaron en correr e intentar socorrer a la anciana. En el instante en que subían las escaleras estalló la bombona de gas, y trozos de madera, metal y hasta llamas se fueron contra los uniformados. “Las llamas crecieron y los gritos de la señora poco a poco se fueron silenciando”, expresó Ulpiano Cedeño.

Fueron al rescate. Kelvin García, jefe del Cuerpo de Bomberos de Rocafuerte, manifestó que el siniestro se habría originado por un incendio en la cocina. También señaló que al momento de arribar al lugar se encontraron con una situación extrema, y con una vivienda tomada por el fuego.

Por su parte César Carrera, jefe de Operaciones de la Policía en Manabí, confirmó que tres agentes resultaron con afectaciones menores luego de ser alcanzados por los restos del tanque de gas que explotó.

“Nuestra gente hizo lo posible por rescatarla, pero las circunstancias no lo permitieron”, citó Carrera.

María Asunción Cedeño Mendoza vivía sola en su casa. Era una mujer que se valía por sus propios medios para subsistir y no le gustaba pasar mucho tiempo con sus vecinos o de visita en las propiedades de sus hijos.

Ulpiano Cedeño, su yerno, recordó que justamente el viernes por la tarde la visitó para conversar un rato e invitarla a su casa, y dijo que con gusto después devolvería la visita.

Destacó además que su suegra era de las personas que pese a la atención que le prodigaban sus parientes, se rehusaba a quedarse en otro lugar que no fuera su hogar.

Recomendaciones. El jefe de Bomberos de Rocafuerte dijo que en muchas ocasiones, estos accidentes suceden porque las personas se olvidan que tienen prendidas las hornillas y el sobrecalentamiento afecta las estructuras inflamables más cercanas. 

“Siempre hay que chequear la cocina”, dijo.