Agusto Calazacón y su hijo Henry explican sobre la importancia de los rituales y baños en la cultura de los tsáchilas.

“Se la hace con el propósito de equilibrar las energías de las personas que se encuentran estresadas, agobiadas y sin poder concluir algún propósito”, sostiene Henry. 

“Todos tenemos algo de los cuatro elementos de la Tierra, somos agua, fuego, aire y tierra, y lo que buscamos con esta práctica ancestral es ayudar a que esos elementos se mantengan armonizados”, explica Agusto, quien tiene 63 años y es sobrino del último gobernador vitalicio, Abraham Calazacón.

Para Henry,  los rituales y las limpiezas se han malinterpretado.  “Muchos creen que tienen que ver con brujería, pero esto es sabiduría ancestral que permite alinear la energía de una persona con la Paccha Mama para que le ayude a vivir en armonía en este planeta”, dice.

PROCESO. Los rituales empiezan con una limpieza energética en la que se utilizan piedras que han sido entregadas de padres a hijos, hierbas medicinales con las que se preparan ungüentos y con las que se limpia el cuerpo, los cantos son en tsa´fiki y son llamados a todos los seres que viven en la montaña,  para que entreguen bendiciones a la persona que busca armonía. Una vez culminada la limpieza se da paso a la toma de agua medicinal para la limpieza del cuerpo.