Los allegados comentaron que ese día Gilces había salido de su vivienda para visitar a varios de sus familiares que viven en la misma parroquia y en la noche cuando regresó a su hogar fue emboscado presuntamente por un hombre con el cual había tenido problemas anteriormente.

Según los familiares, al parecer el criminal, aprovechando que el sitio es oscuro, se había escondido en uno de los rincones del patio y cuando Gilces se bajó de su motocicleta y se dirigía a abrir la puerta de su hogar lo sorprendió y le descargó varios disparos, algunos de los cuales impactaron en su cuerpo y en la pared de la casa, cerca de una ventana.

Una vez que realizó los disparos el asesino saltó las cercas de unas propiedades aledañas y desapareció del lugar, dijeron los allegados.

A LA MORGUE. A los pocos minutos, al lugar de los hechos llegaron varios agentes de la Policía y paramédicos, quienes comprobaron que José Gilces había muerto, por lo que se protegió el lugar de los hechos, a la espera de que se realicen los procedimientos técnicos determinados para la investigación.

Uno de los disparos la víctima lo recibió en la cabeza, se conoció.

Según los familiares, hace varios meses Gilces habría tenido problemas con un grupo de personas que le quisieron robar su motocicleta y como opuso resistencia, uno de los ladrones lo habría amenazado de muerte al no poder quedarse con el vehículo.

Personal de la Policía Judicial (PJ) se encargó de realizar el levantamiento del cadáver de Gilces, el cual fue trasladado hasta el centro forense de Manta para que se le realice la autopsia y así continuar con la investigación para dar con el paradero del criminal.

Los familiares explicaron que Gilces era agricultor y estaba separado desde hace varios años de su conviviente, pero aún mantenía contacto con ella, ya que tuvieron varios hijos.

La mañana de ayer, los familiares de Gilces esperaban en el patio de su casa, en el ‘Callejón del Humo’, la llegada del cuerpo desde Manta, para velarlo.