Una nutrida delegación de campesinos recorrió ayer las principales calles de la ciudad, al igual que en la mayoría de capitales provinciales del país, con el objetivo de exigir que la Superintendencia de Bancos y Seguros respete la autonomía del Seguro Campesino y cobre a las empresas aseguradoras más de 20 millones de dólares que deben pagar por concepto de la retención de 0,5 por ciento al valor de las primas del seguro directo.