El presidente ejecutivo de Petroecuador, Carlos Pareja Yanuzzelli, dispuso la separación del Superintendente de la Refinería Estatal de Esmeraldas, Gustavo Pavón, como una de las medidas para corregir el trabajo deficiente en la instalación.
Además de Pavón también se destituyó a otros 16 empleados, quienes fueron encontrados por Pareja Yanuzzelli durmiendo mientras se suponía que estaban cumpliendo con su turno de trabajo en la madrugada.
En reemplazó de Pavón fue nombrado Wilfredo Sierram quien asume el control administrativo y operativo de la planta, que trabaja al 40 por ciento de su capacidad.