Desde entonces, Ramona se sumió en su tristeza. “Solo paso llorando al recordar que mi hijo ya no me vendrá a visitar”, señala.

El accidente ocurrió en el sitio Sosote del cantón Rocafuerte, en la vía Portoviejo-Crucita, la noche del 8 de agosto.

TRABAJABA LEJOS. Paulo Laz era oriundo del sitio Mejía de la parroquia Picoazá de Portoviejo, pero trabajaba en Quito.

“Regresaba cada 15 días a Portoviejo a visitar a la familia. Llegaba siempre un fin de semana de noche y cuando lo sentía entrar a la casa lo llamaba para preguntarle cómo le había ido”, cuenta Ramona.

El recuerdo es un doloroso aliciente. “Cuando escucho un ruido pienso que es él que está llegando y lo llamo, hasta que vuelvo a la realidad y recuerdo que está muerto”, dice, entre lágrimas, la madre.

El accidente ocurrió un sábado.  Como de costumbre, luego de pasar un rato con su madre y su esposa, Laz tomó una motocicleta para viajar a la parroquia Crucita, donde iba a visitar a un hermano al que hace tiempo no veía, pero nunca llegó a su destino, dijeron sus familiares

Los allegados a Laz manifestaron que pasadas las 23h00 de ese día les avisaron que él había sufrido un accidente de tránsito en Sosote y estaba muerto en la carretera.

Varias personas dijeron haber presenciado lo que ocurrió.

Los familiares de Laz conservan el parte policial que se elaboró el día del accidente. El documento indica que se trató de un choque y atropellamiento, es decir, que la motocicleta en que viajaba la víctima se estrelló contra el parterre central, por lo que Laz cayó en medio de la carretera y luego fue aplastado por un vehículo que no ha sido identificado.

Tampoco se conoce al chofer.

“Estoy luchando para que se haga justicia, para que las autoridades encuentren al culpable, pero esto es algo muy difícil y a veces siento que ya no puedo más. Me siento sola, afrontando todo este caso. Espero que quienes presenciaron el accidente aparezcan y den su versión a las autoridades”, manifiesta Elizabeth Cobeña, la mujer de Paulo Laz.

Asegura que el accidente fue denunciado en la Fiscalía e incluso el cuerpo de Laz fue trasladado horas después de su muerte al centro forense de Manta para que se le hiciera la autopsia, como determina la ley, para tratar de esclarecer el hecho.

La familia dice que esperan que las autoridades continúen con las investigaciones y se encuentre al causante de la muerte de Laz.

El fallecido procreó tres hijos en un compromiso anterior, indica su familia.