Dice que su última medalla de oro la ganó a inicios de este año. Tenía previsto este mes viajar a México a una competencia, pero en mayo tuvo que someterse a una operación que le impidió cumplir uno de sus sueños: ganar su primer campeonato internacional.

Enfermedad. Era la última semana de abril cuando Geoconda corría en uno de sus entrenamientos en la Federación Deportiva de Manabí (FDM) y sintió un ligero dolor cerca del ombligo. “Yo pensé que era porque no había desayunado, pero luego que fui al cuarto a descansar, me acosté y me fijé que tenía una bolita que se movía”, explica. Y recuerda que tuvo que dejar la FDM sin avisar, viajó a casa de sus padres en el Mirador San Antonio de Jipijapa. 

Luego de una semana de diagnósticos médicos se sometió a una operación donde le extrajeron un tumor maligno (cáncer) de un ovario.  

Con un poco de ingenuidad Geoconda dice no conocer mucho sobre su enfermedad, y con la sonrisa que lleva siempre en su rostro confiesa no temerle a lo que padece, pues asegura que esta lucha la va a ganar. “Me han dicho que por ahora no piense en los estudios, ni entrenar, pero en diciembre habrá una competencia y yo sé que voy a ir”, dice optimista.

Su madre, Carmen Mite, habla de los días duros que les ha tocado pasar. Indica que para costear los gastos ha tenido que hacer un bingo, con el objetivo de recaudar dinero. “Son destinos que nos ha puesto Dios, a ver si uno lo puede superar. Pero tengo tanta fe, que sé que ella va a seguir adelante”, dice Carmen, mientras explica que en dos semanas su hija tiene que realizarse una resonancia y otros exámenes.