Como él, 656 uniformados más de la provincia saldrán desde el lunes a colaborar con el Ministerio de Salud Pública (MSP) en el control del mosquito que trasmite el dengue y la fiebre chikungunya.

Juan Carlos, quien conduce una de las tanquetas del Grupo de Caballería Mecanizada #12 (GCM-12) “Teniente Hugo Ortiz” en Portoviejo, al igual que sus compañeros recibió una capacitación para desde el lunes distribuirse en la provincia.

Distribución. Carmina Pinargote, coordinadora zonal del MSP, informó que se movilizarán uniformados de varios destacamentos: el Ala de Combate #23 de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE), la Base Naval de Jaramijó y el GCM-12 de Portoviejo.

Sólo este último aportará con 180 militares, informó José Andrade, jefe del GCM-12.

Pinargote anunció que los militares serán repartidos según la prioridad que determinen los casos registrados en cada cantón. Así, se intervendrán primero Portoviejo, Manta y Jipijapa, por ejemplo.

En la provincia los registros de la fiebre chikungunya ya superan los 3 mil casos y en dengue los 7.500, esta última supera a todos los años en la última década.

Estrategia. Melva Morales,  a cargo del proceso de vigilancia de la salud pública, explicó que los uniformados serán divididos en dos grupos: uno se encargará de colocar abate en las viviendas y hacer educación para la salud con las familias. Otro se concentrará en estrategias de erradicación y fumigación.

Morales recordó que el efecto de la fumigación es temporal y que lo más importante es la destrucción de los criaderos.

Experiencia. El soldado Yaguana, quien es  oriundo de Loja, recuerda que hace unos dos años cuando  llegó al Fuerte Militar Manabí se sorprendió por el ataque de los mosquitos en la época de lluvias. “Aquí es común, allá no”. Ahora confiesa que se siente orgulloso de aportar en algo al combate de este insecto, su nuevo enemigo.