Así como Mariana, moradores de esta comunidad temen que la crecida del río Portoviejo, el cual cruza por este sector, siga perjudicando a sus habitantes. “He perdido parte de mi terreno, palmas y plátanos porque se los ha llevado el río”, explica Demera.

Flavio Zambrano también vive a orillas del río, él explica que el socavamiento de la tierra es producto de la falta de piedra escollera en esta comunidad, “la piedra no llegó hasta nuestra vivienda, por eso el agua va destruyendo las orillas”, agregó. 

Para evitar que el afluente gane terreno han tenido que atar ramas con alambres a orillas del río para que no siga “metiéndose” ni ganando espacio.

Zambrano comentó que han enviado los informes a las autoridades de Riesgo, pero no han obtenido respuestas.

Habitantes de esta comunidad esperan una solución inmediata, pues el río Portoviejo toma mayor fuerza.