La reducción se empezará a aplicar desde el 1 de marzo, según el decreto ejecutivo que firmó el presidente. 

El objetivo es conseguir 21 millones de dólares que faltan para llegar a los 41 millones necesarios para contratar a 2.187 profesionales adicionales del sector de la salud que se implicarán en el objetivo de reducir los índices de muerte materna, informó el Ejecutivo.

El ministro de Trabajo, Carlos Marx Carrasco, aseguró que se revisarán también las tablas salariales en los cabildos y que ya están listas las nuevas bases y topes de remuneraciones para funcionarios municipales. 

La Asamblea. Por su lado, el bloque de asambleístas de Alianza PAIS anunció que la medida también se aplicará para los asambleístas.

“Como militantes somos categóricos al decir que todos los esfuerzos van ligados a cortar la brecha de pobreza en el país. El año 2015 es el año para luchar contra la mortalidad materna”, dijo la presidenta de la Asamblea, Gabriela Rivadeneira.

La presidenta de la asamblea indicó que generará una reunión con otros presidentes de funciones del Estado para estudiar el ajuste conjunto.

Aseguró que en la función legislativa, luego del receso, el 5 de marzo el Consejo de Administración Legislativo (CAL), deberá determinar el porcentaje a aplicarse entre los asambleístas.

Reacciones. El asambleísta alterno Carlos Vera señaló que la medida que impulsa el presidente Correa le quitaría unos 700 dólares a cada funcionario por mes. 

Eso en medio de la crisis, según Vera, es como hacer cosquillas bajo la actual realidad. Según el legislador, lo que se debe hacer prioritariamente es reducir la alta  corrupción.

El asambleísta Andrés Páez indicó que el gobierno debería “eliminar gastos exorbitantes semanales que se hacen en sabatinas”. 

El abogado Roosvelt Cedeño dijo que los salarios de los funcionarios se pueden reducir porque “está bajo los parámetros  del básico unificado”. “Lo de fondo es que es una medida política y mediática que poco aporta a la crisis presupuestaria”, dijo.