Así lo dijo Adriano Chica, quien tiene once años en este trabajo. Él junto a siete personas más trabaja actualmente en la limpieza de La Poza. 

El trabajo inició desde la desembocadura de los ríos Manta y Burro, en el sector del monumento a El Pescador. 

Chica aseguró que este año han trabajado más que en otros períodos, precisamente, porque están atendiendo lugares que nunca antes habían limpiado como es el caso de La Poza.

El obrero señaló que en este lugar llevan dos semanas de trabajo y que esperan dejarlo listo en el transcurso de la nueva semana. 

“A más de la maleza y la basura que tenemos que evacuar, nos encontramos con numerosas personas de todas las edades que se esconden en las piedras de este lugar para drogarse”, indicó.

“Sería bueno que alguna institución especial se interese por estas personas, sobre todo, porque hay menores de edad”, sugirió. 

SALUD. Otro de los  obreros manifestó que el trabajo los enferma, no por el esfuerzo físico, sino por  el uso permanente de las botas que les genera infección a las vías urinarias. También sufren de gastritis y faringitis cuando les toca trabajar en los cauces de los ríos, sobre todo, en el Muerto y Manta, donde hay mayor contaminación, se manifestó.

José Chica reconoció que el municipio les entrega implementos de protección, pero no los usan por el calor, lo que dificulta trabajar al machete.

Se conoció que la Dirección de Higiene mantiene tres cuadrillas de macheteros que rotan en la limpieza de la maleza. Un total de 30 personas realizan esta tarea.

 Fiesta. La limpieza del sector de La Poza tiene que ver con las Fiestas del Comercio y la cantonización de Manta.

Jimmy Asanza, director de Costa Limpia, dijo que la limpieza facilitará el mantenimiento de este lugar que estaba convertido en un botadero público. Lo propio se realiza  en otros cauces y quebradas, anotó.