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Sociedad
Danza y música, características del montubio

El manabita siempre ha sido amigo del baile y de la música alegre. Un folleto de Jesús Álvarez Loor, músico chonense, registra los principales rasgos de la música y la danza montubia.

Viernes 15 Agosto 2014 | 04:00

Yuri Palma, director musical del grupo Mentaos de la Manigua, indica que en base a la recuperación de esta información y del patrimonio sonoro, los grupos que en la actualidad muestran el folclore de la provincia han podido representar cómo bailaban los montubios de la época.
En cuanto a música, Yuri Palma destaca tres ritmos bien definidos. 
La jota montubia, el galope montubio y el amorfino, no solo como manifestación literaria, sino como expresión musical. “El amorfino se baila. 
Las parejas se ponen frente a frente y avanzan hasta encontrarse, la mujer se contonea con las manos en la cintura y luego el hombre gira alrededor de ella”, detalla.
Uno de los ritmos desaparecidos, indica Palma, es el costillar, algo que se bailaba en los salones, pero del que no existe un registro. 
DANZA. Ya en la parte escénica de la danza, Yuri Palma manifiesta que había pasos de baile como el de punta-talón y el de la puerca raspada, éste último con un nombre particular.
La bailarina e instructora de danza de la academia AMA de Portoviejo, Priscila Gómez, entra más en detalle y explica que el paso de la puerca raspada se llama así porque “se imita a los puercos cuando se rascan las patas”.
Gómez señala que actualmente los grupos de baile hacen un rescate de la danza montubia, a través de un montaje estético en el que no hay pasos puros del folclore manabita. “No solo son movimientos, sino figuras que se trabajan con la vestimenta para dar un bonito espectáculo”, explica.
VESTIMENTA. Tanto Yuri Palma como Priscila Gómez explican que la vestimenta usada por los montubios tiene una influencia europea.
Para el hombre, el color que se imponía era el blanco en camisa y pantalón. “El ser un hombre de la costa y de puerto hacían que el blanco fuese el color más utilizado, porque calienta menos”, dice Palma. 
Además, los pantalones y camisas deben ser de tela ligera, asimismo utilizan un pañuelo rojo en el cuello y un sombrero de paja toquilla. 
Por su parte, Priscila Gómez resalta que el algodón era la tela más utilizada, con estampados de flores, bolas y también colores fuertes. “Era lo que llegaba a los pueblos manabitas y no quedaba más que consumir esos productos”, dice. Y agrega que la verdadera falda de la montubia manabita no es larga ni ancha, sino en “estilo A” y hasta la rodilla. 
La blusa se utiliza hasta el ombligo, con vuelos. 
 
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