Según Ricardo Pin, presidente de la Fundación Salvares, la ley de la Dirección Nacional de Gestión de Riesgo, determina que los municipios deben integrar a los salvavidas profesionales al cabildo. “Proceso que esperamos no se dilate más porque aquí todos somos padres de familia y no podemos mantenernos con el apoyo económico que recibimos de Autoridad Portuaria de Manta (APM) y el municipio”, expresó.
Pin manifestó que ser municipales les ofrecerá ventajas como el aseguramiento social. “Esto es necesario para cuidar nuestra salud y la de nuestros hijos”, agregó.
Hernán Navarrete, salvavida, dijo que hasta el año pasado tenían un presupuesto mensual de 2.000 dólares, financiados el 50% por APM y restante por el municipio.
Este año el municipio nos ha incrementado 1.500 dólares más para trabajar de jueves a domingo de 08h00 a 18h00, señaló.
Navarrete dice que los 3.500 dólares apenas cubren las necesidades básicas de los 13 salvavidas que forman la Fundación, como también la logística de los voluntarios que apoyan en los feriados.