Se debe a que hay oficios que obligan a determinadas personas a cumplir con horarios nocturnos.

Luis Párraga, quien es guardia privado, comentó que la Navidad la recibirá solo en la garita de seguridad en la planta de tratamiento de Cuatro Esquinas.

No oculta que le causa nostalgia el no poder abrazar a su familia en un momento que tradicionalmente es importante, pero sabe que debe cumplir con su deber. “Este es mi segundo año que coincide mi turno con la Navidad, pero hay que tomarlo bien”, añadió.

OTROS CASOS. Holver Zambrano también estará lejos de los suyos. Es oriundo de la provincia de Santo Domingo, pero hoy a la medianoche estará en la Unidad de Policía Comunitaria de la ciudadela Nuevo Portoviejo. Él es policía desde hace 8 años y 4 no ha pasado Navidad con sus familiares. “Así es el trabajo, nos forman para dar seguridad las 24 horas y debemos ser responsables aunque eso nos cueste momentos especiales”, dijo.

Antonio Menéndez y Alfredo Vera, ambos bomberos, en cambio están contentos porque esta vez pasarán con sus familias, ya que el año pasado lo hicieron en el cuartel de la parroquia San Pablo. No obstante, Menéndez dijo que no pueden disfrutar al máximo porque deben estar atentos a cualquier emergencia.

Miriam Carranza es enfermera y madre de tres hijos. Es otra ciudadana que deberá estar de turno en unas de las clínicas de la ciudad. “Es la primera vez que me pasa y estoy triste porque pensaba estar con mis hijos, compartir la cena y abrir los regalos”, agregó.