Kaláshnikov creó el fusil de asalto en 1947, para "defender la frontera de mi patria de la Guerra Nazi", según él mimo manifestó hace varios años.

Su arma está considerada como la mejor del mundo en su categoría.

Cabe destacar, que la Unión Soviética primero armó con el AK a sus aliados en Europa del Este, y luego exportó el modelo a todos los continentes. Por lo que en la actualidad se han fabricado a nivel mundial más de 100 millones de ejemplares.

Por su labor, el ingeniero recibió varias de las condecoraciones más destacadas de la Unión Soviética: Héroe de la Federación de Rusia, la Orden de la Bandera Roja del Trabajo, la Orden Patriótica de la Guerra de Primera Clase y la Orden de la Estrella Roja.

En el 2012, Kaláshnikov lamentó que su arma sea utilizada para conflictos interétnicos, cuando su objetivo era sólo defender a su patria. “Al ver a los nazis quemando aldeas, masacrando y que nosotros no tuviéramos armas de fuego automáticas me impulsó a crear una eficaz para los nuestros", dijo.

"No es mi culpa que sean empleados en conflictos interétnicos y de otro tipo. Son los políticos quienes no se ponen de acuerdo en cuestiones de litigios", se disculpó en sus declaraciones, que reproduce el diario oficial "Juventud Rebelde".