El hallazgo ocurrió el 31 de agosto del 2011 en la ciudadela Rafael Correa, de la parroquia Simón Bolívar, en Portoviejo.

El suceso conmocionó a la ciudadanía por la forma en la que se dio el crimen.

Una vecina de la víctima, en su versión, dijo que cerca de las 05h00 se habían escuchado ruidos en la casa donde vivía Gema.

Después escuchó que la adolescente gritaba. La vecina aseguró que llamó a la Policía, pero cuando el patrullero llegó su esposo no la dejó salir.

La mujer dijo que horas después vio salir de la casa a un hombre al que identificó como "Pelé". Entonces llamó a Gema y al ver que no contestaba le pidió  a su hijo que ingresara por un hueco. 

El menor avisó que Gema estaba desnuda y ensangrentada.

La señora llamó a la Policía y poco a poco los vecinos del sector llegaron.

Gema se había quedado sola porque su madre, Teresa Macías, había ido a cuidar a su esposo que estaba internado en el hospital.

Sentencia. Fue al cuarto día de lo sucedido que la Policía logró capturar a "Pelé", en el cantón El Empalme de la provincia de Guayas, desde donde fue trasladado a Manabí.

Sin embargo, por los riesgos que su vida corría no fue enviado al Centro de Rehabilitación Social El Rodeo, sino a la cárcel de la provincia de Santo Domingo de los Tsáchilas, donde actualmente guarda prisión.

Después de ocho meses de la detención de "Pelé", éste fue sentenciado a 35 años de cárcel después de haber sido señalado como culpable por los jueces del Primer Tribunal de Garantías Penales de Manabí, por el asesinato y violación de Gema Zambrano Macías.

“Pelé” es el primer detenido que es sentenciado con una condena de prisión especial en Manabí a 35 años de cárcel.