El administrador, Gelasio Hidalgo, recordó que por tratarse de un mes donde no hay clases y por ende la circulación de dinero es mínima, los comerciantes se vieron obligados a acudir más temprano a sus lugares de trabajo para captar la venta de quienes salen del campo para hacer sus compras en la madrugada y que luego, entre 06h00 y 07h00, dedican tiempo a otras necesidades.

Usualmente, en el pasaje San Cayetano se atiende a partir de las 08h30, pero en esta época y por pedido de los arrendatarios, las puertas están abiertas desde las 06h00.

“Los campesinos salen por los víveres y luego van por otras cosas. Entonces pueden visitar el pasaje comercial para satisfacer sus necesidades”, dijo Hidalgo.