El carro de Bieber es la envidia de cualquier adolescente de su edad. El modelo es un Fisker Karma y es el 'regalito' que el cantante recibió con motivo de su cumpleaños. En un principio el modelo estaba pintado con un elegante y discreto color negro eclipse metalizado, sin embargo a Justin no le gustaba demasiado y decidió “tunearlo”, convirtiendo al auto en un auténtico espejo andante.