El Consejo Nacional Electoral (CNE) deberá revisar 4.836.758 firmas en un periodo de 10 días, lo que supone un equipo de 2.700 digitadores trabajando las 24 horas del día.
Esta carrera contra el tiempo, se da para evitar que los comicios electorales del 2013 sean aplazados, luego de que el CNE anunciara que los movimiento políticos deberán iniciar un nuevo proceso de recolección de firmas para poder ser aprobados por la entidad.
El pasado 5 de agosto, el CNE resolvió que en caso de que las organizaciones políticas ya inscritas no alcancen las 157.987 firmas de respaldo, que corresponden al 1,5% del padrón electoral del 2009, se dejará sin efecto las resoluciones con las que antes les otorgó personería jurídica, informó diario El Universo.
Luego de la resolución del CNE se han suscitadodiversas opiniones en torno al proceso de verificación de firmas.
Cinthya Viteri, asambleísta de Madero de Guerrero y abogada de profesión, respalda la anulación de las firmas, ya que considera que la falsificación de firmas es un verdadero delito. “Si un acto administrativo (el reconocimiento de las agrupaciones políticas) nace de un delito simplemente ese acto no existe”.
Por su parte, Maria Paula Romo, de Ruptura de los 25, considera que la responsabilidad en este hecho reside en el CNE, ya que una vez que se autorizó la inscripción de los grupos políticos ya no tiene facultad legal para volver a revisar las firmas ni para eliminarlas del registro electoral.