Con este proyecto se descarta la planta desalinizadora que se anunció construir en Manta.
El proyecto de desalinizadora se descartó por el alto costo de operatividad.
Pedro Merizalde, gerente de la Refinería, dijo que es más caro construir dicha planta que comprar y enterrar la tubería.
Sólo la planta estaba presupuestada en 200 millones de dólares.
"Recordemos que procesar agua salada para convertirla en dulce, es más costosa que cualquier otro sistema hídrico", aseveró.

Requerimiento. El complejo petroquímico requerirá de cinco mil metros cúbicos hora para el refinamiento del petróleo.
El complejo procesará 300 mil barriles de crudo diario.
"Es por eso que tendremos agua desde la represa La Esperanza, en el cantón Bolívar", comentó.
Juan Peláez, consultor de la Refinería, dijo que a través de un equipo de profesionales ha trabajado en un plan de identificación de las fuentes de alimentación hídrica en Manabí, lo que ha permitido visualizar el futuro abastecimiento de agua para la petroquímica.

Proyecto. Peláez confirmó que la red de agua nacerá en la presa La Esperanza y desde este lugar, a través de una sola estación de bombeo será impulsada hasta la Refinería, ubicada en la zona rural de Manta y Montecristi.
El recorrido será de 106 kilómetros y ha sido trazado conceptualmente para que avance a orilla de las carreteras a una profundidad de 3 metros.
La tubería será de acero al carbono.
Bordeará la carretera de Calceta-Tosagua, luego la Tosagua-Rocafuerte y Rocafuerte-Manta.
Desde esa vía se internará para salir a Los Bajos de Montecristi y de allí a la petroquímica.
El costo de esta obra  se estima en 106 millones de dólares.
Mientras que los estudios de Ingeniería Básica que serán ejecutados por la empresa norteamericana Worley Parsons costarían 6 millones de dólares, anunció Merizalde.
El asambleísta Tomás Zevallos dijo que captar agua en La Esperanza no es la mejor propuesta, por los costos que significarán.
Indicó que deben analizarse bien ese tema.