Vigilantes del sistema regional de trenes regional de Johannesburgo (Gautrain), detuvieron durante cuatro horas a dos hermanas sudafricanas por masticar chicle en el andén.
Pontso Pakkies y Lebo Sibisi masticaban chicle después de comer mientras esperaban el tren hacia Pretoria, cuando un vigilante les pidió que tiraran el chicle. Las dos jóvenes fueron retenidas en una sala donde el teléfono móvil no funcionaba, sin poder salir al baño o avisar a sus familias, esperando la llegada de la policía.
Finalmente fueron liberadas después de pagar una multa de 70 dólares.<