La probabilidad de que el bebé naciera el mismo día que lo hicieron sus padres era una en 48 millones. Y pasó. Una pareja tuvo a su hijo el 19 de julio, fecha en que ambos progenitores celebran sus cumpleaños.
Recibieron, sin dudas, el mejor regalo. Las estadísticas indicaban que la probabilidad de que el bebé naciera el 19 de julio, misma fecha en que lo hicieran los papás de la criatura, era una en 48 millones. ¡Y pasó!