El ex dictador que aparentemente había reaccionado bien finalmente falleció, justo en el cumpleaños número 84 de su esposa, Lucía Hiriart Rodríguez. El parte médico “El Hospital Militar de Santiago comunica el sensible fallecimiento del ex presidente de la República y ex comandante en jefe del Ejército general Augusto Pinochet Ugarte”, señaló un escueto comunicado del nosocomio castrense. “A las 13h30 (16h30 GMT) (11h30 Ecuador) el paciente sufrió una inesperada y grave descompensación que obligó a su traslado en estado crítico a la Unidad de Cuidados Intensivos, donde se aplicaron todas las medidas médicas de resucitación no lográndose la respuesta médica positiva falleciendo a las 14h15 (17h15 GMT)” (12h15 Ecuador), precisó el comunicado. A favor y en contra Tras difundirse el deceso del ex gobernante de facto (1973-1990), decenas de partidarios comenzaron a agolparse en las afueras del hospital, con lágrimas en los ojos y gritos a favor de quien consideran el salvador de Chile. También en las calles de Santiago se vieron vehículos con detractores del general, que había cumplido 91 años el pasado 25 de noviembre, que hacían sonar las bocinas en clara señal de jolgorio por la muerte de quien era, para ellos, el dictador más brutal de la historia. En algunos sectores periféricos, grupos de vecinos salieron a las calles, levantaron barricadas y gritaron consignas contra Pinochet y su régimen. Los partidarios de Pinochet que estaban frente al hospital agredieron y lanzaron objetos contra los periodistas y transeúntes, pero la policía aisló rápidamente el sector y los incidentes no pasaron a mayores. Durante el régimen que encabezó Pinochet, unas 3.200 personas murieron a manos de agentes del Estado, de las que 1.192 permanecen como detenidas desaparecidas, más de 28.000 fueron torturadas, según datos oficiales, y alrededor de 300.000 debieron exiliarse por razones políticas. Al momento de morir, Pinochet estaba procesado como presunto autor de secuestros (desapariciones), homicidios y torturas en al menos tres casos por violaciones a los derechos humanos.También por una treintena de víctimas de la Operación Colombo, montada en 1975 para encubrir la desaparición de 119 disidentes y por otros tantos casos de desaparición y torturas en la Villa Grimaldi, una cárcel clandestina de la DINA, la policía secreta de la dictadura. Asimismo, estaba procesado por fraude al fisco y uso de pasaportes falsos en relación con el descubrimiento, en el 2004, de numerosas cuentas secretas a su nombre en el Riggs Bank de EEUU y otros bancos del exterior, en las que acumuló una fortuna. TENÍA UNA SEMANA CON EL PROBLEMA Augusto Pinochet murió ayer domingo, ocho días después de haber sido ingresado en el Hospital Militar de Santiago. MUCHOS RECLAMAN POR SU VIOLENCIA Durante su régimen, unas 3.200 personas murieron a manos de agentes del Estado, de las que 1.192 siguen como desaparecidas. ESTABA MEJORANDO En los últimos días, el hombre fuerte de Chile, Augusto Pinochet había evolucionado positivamente de su infarto de miocardio y el pasado jueves había sido trasladado desde la unidad de cuidados intensivos a una sala de cuidados intermedios. El ex dictador ya se alimentaba solo y hacia ejercicios de kinesioterapia, y los médicos esperaban darle de alta mañana martes o el miércoles próximo. Incluso un parte médico emitido a las 13h00 GMT (08h00 de Ecuador) de ayer, por la casa de salud en donde recibia asistencia, daba cuenta de que tales condiciones positivas se mantenían sin alteraciones lo cual daba la posibilidad a sus familiares y simpatizantes de que el ex dictador se restableciera de su problema de salud. Pero expertos en cardiología consultados por la agencia Efe habían señalado que dado el historial médico y la edad de Pinochet, difícilmente sobreviviría un nuevo ataque. Ahora y de acuerdo con las leyes chilenas, tras su muerte Pinochet deberá ser sobreseído en todas las causas que lo involucraban.