Cuenta la maestra Holanda Cedeño que la salud de los niños está en riesgo, pues hay malos olores y moscos en abundancia. Por ello esperan que las autoridades se hagan presenten para solucionar el problema.
Este es sólo un pequeño ejemplo de las consecuencias del invierno. Y es justamente que para atender pequeñas y grandes necesidades de la población se activó ayer el Comité de Operaciones Emergentes, COE provincial.
Esto se realizó en la Gobernación de Manabí, hasta donde llegaron las principales cabezas de las instituciones públicas, quienes se repartieron en siete mesas de trabajo, que serán las encargadas de planificar acciones y actuar de inmediato en caso de que se presenten las emergencias.
La gobernadora María Luisa Moreno solicitó a los presentes disponibilidad a cualquier hora y no apagar los celulares. Asimismo, pidió que nadie se ausente de sus puestos y que de haber una necesidad dejen reemplazos.
Las mesas que se conformaron son las de acceso y distribución del agua; promoción de la salud, saneamiento e higiene; infraestructura, reconstrucción y rehabilitación; atención integral a la población; seguridad integral de la población; productividad y medios de vida; y educación, cultura, patrimonio y ambiente.
El director de la
Sala Situacional, Ricardo Cabrera, mencionó que los integrantes de cada mesa deberán reunirse periódicamente para evaluar posibles daños y las acciones a tomar.

EDUCACIÓN. El director provincial de Educación, Juan Abel García, también se refirió al los problemas en  algunos planteles de Manabí debido a las lluvias y comentó que ha pedido a los supervisores evaluar la situación y que pasen un informe esta misma semana. “La culminación de las clases esta para el 26 de enero, pero ante todo velaremos por la seguridad de los niños y si hay que terminar antes en algunas escuelas hay que hacerlo”, agregó García. <