Las estadísticas revelan que de 400 accidentes de tránsito, sólo tres fueron fortuitos, y los otros por imprudencia de conductores, por manejar ebrio o no respetar las señales de tránsito.
Gonzalo Avilés, principal de la Subjefatura de Tránsito de Manta, señaló que esto evidencia que los accidentes podrían evitarse si las personas condujeran con precaución y tuvieran una cultura de respeto, tanto a la vida como a las señales de tránsito.
Tener conciencia
El año que terminó dejó 26 personas muertas en accidentes de tránsito, la mayoría en choques.
Avilés manifestó que el año pasado se detuvieron a 240 conductores, quienes manejaban en estado etílico.
"Esto refleja que estas personas no tenían mayor consideración, ni por su vida ni por la del peatón. No hay que olvidar que un ebrio al volante es una bomba de tiempo”, dijo Gonzalo Avilés.
En el 2008 los muertos por accidente sumaron 38 víctimas.
Los muertos disminuyeron, pero no así el número de accidentes y detenidos por conducir ebrios.
Carlos Bustamante, comerciante, dijo que en la mayoría de choques siempre está involucrado un taxi, pero esto muchas veces es porque quienes están al volante no son profesionales, sino que han obtenido la licencia "por la izquierda".
Para Bustamante el aumento en el valor de las multas no fue la solución.
Las personas que conducen deben ser más responsables a la hora de hacerlo y darse cuenta de que no es sólo una muerte, sino que se genera todo un drama social con los familiares afectados.