El barril de crudo de Texas se encareció este lunes un 0,11 por ciento y cerró a 77,56 dólares en Nueva York, en una jornada en la que se difundieron datos positivos sobre el sector inmobiliario en Estados Unidos y en la que el dólar se depreciaba ante el euro y otras divisas.
Al cierre de la sesión en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de Petróleo Intermedio de Texas (WTI) para entrega en enero, que desde hoy se toman como referencia, sumaron nueve centavos al precio con el que cerraron en la última sesión de la semana pasada.
Los contratos de gasolina para diciembre restaron un centavo al valor del viernes y quedaron a 1,97 dólares el galón (3,78 litros), el mismo precio al que acabaron la jornada los contratos de gasóleo también para ese mes después de no registrar cambios respecto al precio de la sesión anterior.
El gas natural para entrega en diciembre se revalorizó cinco centavos y cerró la primera sesión de la semana a 4,47 dólares por cada mil pies cúbicos.
La depreciación de la divisa estadounidense frente al euro y otras monedas favoreció este lunes el aumento del precio del petróleo, que se negocia, como otras materias primas, en dólares, por lo que sus compras resultan más baratas cuando se utilizan monedas fortalecidas ante el llamado "billete verde".
Por un euro se pagaban hoy 1,4967 dólares, comparado con los 1,4868 dólares del viernes.
El precio del crudo se incrementó también después de que la Asociación Nacional de Agentes de Bienes Raíces de Estados Unidos anunciara que las ventas de casas usadas en este país aumentaron un 10,1% durante octubre y alcanzaron una tasa anualizada de 6,1 millones de unidades, la más alta desde febrero de 2007.
Los operadores suelen recibir con esperanza noticias favorables sobre el mercado inmobiliario, ya que les hacen pensar que se acelera la recuperación económica, lo que debería conllevar un aumento de la demanda energética en Estados Unidos.
El mercado neoyorquino también abrió la semana con cierto optimismo después de que se divulgara el resultado de una encuesta de la Asociación Nacional de Economistas Empresariales (NABE), en la que los expertos auguran que el desempleo tenderá a reducirse lentamente el próximo año y que el sector de la vivienda crecerá en 2010 por primera vez desde 2005.

Fuente: El Telégrafo