Esto se pudo evidenciar, por ejemplo, en la terminal terrestre de Portoviejo, donde a primeras horas del día llegaron miles de personas que buscaban un boleto para regresar a casa.
La demanda más fuerte se presentó hacía las ciudades de Guayaquil y Quito. Las boleterías de las cooperativas de transportes estaban repletas, esto los obligó a incrementar carros extras para satisfacer a la gente que quería viajar.
Uno de ellos fue David Intriago, quien aprovechando los días de asueto llegó desde Guayaquil  a la capital manabita el viernes pasado junto a sus hermanos y un sobrino, con la finalidad de visitar a sus padres, ir a velar a sus familiares fallecidos y para divertirse con sus amigos. Intriago dijo que disfruto de todo, pero le molesto que ayer en la terminal le hayan cobrado un dólar más en el pasaje a Guayaquil. Explicó que cuesta 4 dólares pero ayer cobraban 5.
La misma queja presentó Sebastián Arteaga quien también viajó a Guayaquil. “Cada feriado suben el pasaje, aprovechándose de la necesidad de las personas por viajar”, agregó Arteaga.

Comercio bajo
En el centro de Portoviejo se pudo observar que la mayoría de los locales comerciales abrieron sus puertas, sin embargo, la afluencia de personas y vehículos fue baja en comparación al de un día normal de labores.

Junín y Bolívar
En estos cantones el regreso también fue intenso, tanto así que los buses circulaban repletos. En Junín los pasajes hacía Quito ya estaban apartados desde hace varios días por las personas que llegaron a disfrutar del feriado de los difuntos.

Playas
Los balnearios fueron otros de los lugares fuertemente visitados en este feriado, pero de apoco se quedaron sin la gente que llegó de diferentes partes del país, para disfrutar del mar, el sol y la arena.
Lo que si se quedó, fueron las ganancias que tuvieron los comerciantes, que aprovecharon el feriado para hacer un poco de plata.