El juez también se abstuvo de aplicar la medida cautelar contra el ex jefe del Ejército colombiano Mario Montoya, igualmente imputado por el fiscal Carlos Jiménez, que investiga el caso, informó el canal Teleamazonas.
Ambos han sido incluidos en el proceso, luego de efectuarse hoy una audiencia de formulación de cargos en la Corte de Sucumbíos.
El juez Revelo indicó que, al no encontrar los méritos suficientes, se ha "abstenido de emitir la prisión preventiva" contra Naranjo y Montoya, aunque remarcó que, de todas maneras, "sigue la instrucción fiscal" por el caso Angostura.
De su lado, el fiscal Jiménez no compartió la decisión del juez Revelo y afirmó que "hay suficientes" méritos contra Naranjo y Montoya.
Revelo es el juez tercero de lo penal de la Corte de Justicia de la provincia amazónica de Sucumbíos, donde radica el proceso por la muerte de unas 26 personas en el ataque colombiano al sector ecuatoriano de Angostura, lugar en el que las FARC habían construido un campamento ilegal.
Durante esa operación, ejecutada sin aviso ni permiso de Ecuador, fallecieron, entre otros, el entonces "número dos" de las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), alias Raúl Reyes, el ecuatoriano Franklin Aisalla y cuatro universitarios mexicanos.
La Corte de Sucumbíos ya había ordenado la prisión preventiva, con fines de investigación, contra el ex ministro de Defensa colombiano Juan Manuel Santos y el comandante de las Fuerzas Militares, Freddy Padilla, a quienes ha acusado de haber ordenado el ataque en territorio ecuatoriano.
La decisión de Revelo se da en un momento en que los Gobiernos de Ecuador y Colombia han emprendido acercamientos para intentar recomponer sus relaciones diplomáticas, rotas por decisión de Quito, dos días después del ataque en Angostura.
Justamente, mañana, viernes, el canciller ecuatoriano, Fander Falconí, prevé conversar con su colega colombiano, Jaime Bermúdez, para reorganizar la agenda de reuniones planteada dentro del proceso que intenta restaurar las relaciones diplomáticas.
Ese acercamiento obedece a los recientes aplazamientos de las reuniones que debían efectuar las comisiones de Seguridad y de Desarrollo Fronterizo.
La Comisión de Seguridad debía reunirse la semana pasada en Ibarra (Ecuador) y la de Desarrollo Fronterizo en estos días en Ipiales (Colombia).
La agenda prevista por los cancilleres Falconí y Bermúdez contemplaba, además, una reunión de ambos para el 3 de noviembre próximo, aunque esa fecha es festivo en Ecuador.
"Tenemos que reordenar un poco toda la agenda de trabajo que teníamos en este momento con Colombia dado que, de una u otra manera, también teníamos una secuencia lógica en la reunión", señaló el miércoles Falconí, al indicar que al suspenderse citas anteriores de comisiones, se generan "letargos" en otros espacios de trabajo.