Dicha ley en su artículo 2 determina que las ecuatorianas y los ecuatorianos gozan de varios derechos entre los cuales destacan conformar partidos y movimientos políticos, afiliarse o desafiliarse libremente de ellos y participar en todas las decisiones que estos adopten, así como desarrolla en sus artículos 202 y siguientes las normas constitucionales sobre la financiación y el control del gasto de los partidos políticos y movimientos políticos durante la campaña electoral. Hago estas descripciones para que los ecuatorianos y ecuatorianas conozcan que no constituye delito alguno el ser afiliado, afiliada o adherente a un partido político, hecho éste que se lo ha satanizado por parte del movimiento político que gobierna el Estado ecuatoriano, acusando de todos los males de la Patria o la partidocracia; es decir, a los partidos políticos y consecuentemente a sus integrantes. Precisamente hace pocos días en Jipijapa se constituyó una organización antipartidocracia, es decir que el fin que persiguen sus integrantes es rechazar a todos aquellos partidos constituidos y que se constituyan en el futuro, lo cual demuestra el poco civismo o sentido democrático que poseen, conducta esta que debe ser rechazada públicamente por ser un atentado a los derechos políticos de todos los ecuatorianos y ecuatorianas. Desconocen los miembros de esta organización creada en Jipijapa que, precisamente, la misma ley referida, en su artículo 305 señala que el Estado reconoce y garantiza a las personas el derecho a asociarse en organizaciones políticas en forma libre y voluntaria para participar en todos los asuntos de interés público; y que el artículo 306 ibídem expresa también que las organizaciones políticas son un pilar fundamental para construir un Estado constitucional de derechos y justicia. Los integrantes de esta organización antidemocrática, al decir de la fotografía publicada en El Diario, son militantes de Alianza País, movimientos políticos que a lo mejor no piense por estrategia ser partido político, pero aquello no justifica en ninguna medida que se invoque o aliente a actos atentatorios a la democracia y al derecho de las personas. Incluso es público y notorio como otrora grandes dirigentes políticos son hoy también dirigentes políticos de Alianza País y dignatarios o servidores públicos de éste mismo gobierno, razón por la cual también se justifica la creación innecesaria moralmente de esa organización. Como académicos felicitamos la vigencia de esta ley que en su artículo 77 crea el Instituto de Investigación y Análisis Político Electoral para la promoción de la cultura democrática del pueblo, para la investigación y el análisis político electoral que aspiramos sea súper pluralista por el bienestar de todos.