El Fondo Monetario Internacional (FMI) respaldó la eliminación del subsidio al diésel decretada por el presidente Daniel Noboa. La portavoz del organismo, Julie Kozack, afirmó que la decisión fortalece la sostenibilidad fiscal y protege a los sectores más vulnerables del país.
Durante una rueda de prensa, Kozack aseguró que el FMI respalda la eliminación del subsidio al diésel en Ecuador. La vocera subrayó que los subsidios generalizados suelen favorecer a los sectores de mayores ingresos e incluso alientan actividades ilícitas como el contrabando.
FMI: subsidios focalizados y sostenibilidad económica
El FMI considera que destinar recursos a los más necesitados libera espacio para otros gastos esenciales. Esto permite fortalecer la protección social y mantener equilibrio en las finanzas.
Kozack añadió que el organismo sigue con atención las protestas contra la medida y resaltó los esfuerzos del Gobierno por abrir un diálogo nacional para alcanzar soluciones sostenibles.
Acuerdo crediticio y desembolsos con Ecuador
La vocera recordó que el 18 de julio de 2025, el Directorio Ejecutivo del FMI concluyó el segundo examen del Servicio Ampliado del Fondo (SAF) con Ecuador. En esa sesión se aprobó una ampliación de 1.000 millones de dólares, que elevó el acuerdo crediticio a 5.000 millones.
De ese monto, Ecuador ya recibió más de 2.000 millones mediante tres desembolsos hasta agosto de 2025. Según el FMI, el desempeño del país en el programa ha sido contundente y las autoridades cumplieron todas las metas cuantitativas.
Reformas económicas y riesgos externos
Kozack destacó que Ecuador avanzó de forma considerable en las reformas económicas previstas en el plan. Dijo además que el FMI valora la disciplina de las autoridades frente a los compromisos asumidos.
Sin embargo, advirtió que Ecuador enfrenta riesgos externos como la volatilidad de los precios del petróleo, el endurecimiento del financiamiento internacional y la limitada capacidad de acceso a los mercados de capital.
A esos factores se suman los efectos de los desastres naturales y la creciente inseguridad interna, los cuales impactan directamente en la estabilidad social y económica del país. El FMI insistió en mantener medidas responsables que prioricen la estabilidad fiscal y la protección de los más vulnerables.