El café ecuatoriano continúa consolidando su presencia en diversos mercados internacionales, valorado por atributos como su calidad, altitud de cultivo y particular perfil sensorial. Si bien el sector aún se encuentra por debajo de los volúmenes de exportación registrados en décadas anteriores, los datos recientes indican un período de crecimiento y una reconfiguración estratégica hacia la industrialización.
De acuerdo con informes de la Asociación Nacional del Café del Ecuador (Anecafé), durante el año 2023, las exportaciones de café del país alcanzaron 608.374 sacos, lo que representó un valor aproximado de 122 millones de dólares. Estas cifras mostraron un aumento del 13% en volumen y del 8% en valor respecto al año precedente. No obstante, para contextualizar la evolución del sector, en 2013 las exportaciones se situaban en torno a los 1,3 millones de sacos, con un valor de 218 millones de dólares, lo que ilustra una disminución significativa en el volumen total de exportación a lo largo de la última década.
La industrialización: un factor en el desempeño exportador
Un elemento a considerar en el comportamiento reciente del café ecuatoriano es la expansión de su oferta industrializada. Anecafé reportó que, en los primeros once meses de 2023, las exportaciones de café procesado, como el liofilizado o soluble, sumaron 541.663 sacos, generando 113,86 millones de dólares. Esto representó un incremento interanual del 12,05% en este segmento específico.
Este fenómeno de la industrialización implica que una porción considerable del café exportado con valor agregado es procesada dentro del territorio ecuatoriano, utilizando en ocasiones granos importados, lo cual contribuye a la generación de valor localmente y a la utilización de la capacidad instalada de la industria.
Análisis de cifras recientes del café ecuatoriano (2024-2025)
El análisis de los datos más recientes ofrece una perspectiva sobre la dinámica actual del café ecuatoriano. Las cifras consolidadas de 2024 indican que las exportaciones totales de café alcanzaron las 14.769 toneladas, registrando un crecimiento interanual del 18,8% y un valor total de 145 millones de dólares. Dentro de este volumen, se destacó la participación de empresas logísticas, como Grupo Entregas, que manejaron 1.979 toneladas, valoradas en 18 millones de dólares, lo que supuso un crecimiento del 16,9% en sus operaciones con este producto.
María Paulina Romo, presidenta de Grupo Entregas, comentó sobre la labor de su empresa: “Estamos comprometidos con superar fronteras y llevar lo mejor del café ecuatoriano a cada rincón del planeta”, poniendo de manifiesto la importancia de la logística en la conexión entre productores y mercados internacionales.
Por otra parte, los datos del Banco Central de Ecuador para el rubro “Café, té, mate y especias” en 2025 señalan una variación en los montos. En febrero de ese año, las exportaciones alcanzaron aproximadamente 1.722,5 millones de dólares, un incremento con respecto a los 1.642,3 millones de enero. En términos de volumen, las exportaciones en febrero de 2025 fueron de 267.085 kg, superando los 186.643 kg de enero. No obstante, estas cifras son menores a los registros de noviembre y diciembre de 2024, que se situaron entre 280.726 kg y 397.804 kg, lo que sugiere una fluctuación en los volúmenes de exportación de este agregado.
Perspectivas y retos para el sector cafetalero
El estado actual del café ecuatoriano se caracteriza por una fase de recuperación, aunque con volúmenes que aún no igualan los picos de hace una década. Esta situación presenta tanto retos como potenciales áreas de desarrollo. Entre los desafíos, se observa la necesidad de incrementar la producción nacional y la adopción de prácticas agrícolas más sostenibles. La estrategia de posicionamiento de la marca “Café de Ecuador” en los mercados internacionales también se identifica como un área de oportunidad.
La conmemoración anual del Día Mundial del Café en octubre sirve como un marco para visibilizar la contribución de este cultivo a la economía y cultura del país. Asimismo, es un espacio para destacar la calidad del café ecuatoriano exportado y promover iniciativas que buscan integrar la sostenibilidad a lo largo de toda la cadena de valor, como el concepto de “Logística con Propósito”. El futuro del sector parece depender de su capacidad para responder a las demandas del mercado global, manteniendo un equilibrio entre la tradición y la innovación.