La Fuerza de Tarea Conjunta Manabí ejecutó una operación táctica en varios sectores del cantón Jaramijó, provincia de Manabí que consistió en desmantelar cámaras en diferentes sectores. La Fuerza de Tarea 21 «Centro» lideró el operativo para desinstalar sistemas de videovigilancia clandestinos. Grupos delictivos instalaron estas cámaras para monitorear el movimiento de las autoridades. La acción busca frenar actividades ilícitas en la zona. Las Fuerzas Armadas retiraron múltiples dispositivos ilegales durante la intervención.
El operativo responde a estrategias para restablecer el orden público en Manabí. Los sistemas de vigilancia servían para coordinar delitos, según las autoridades. La operación desarticuló una red que amenazaba la seguridad ciudadana. Los militares actuaron con precisión en puntos clave de Jaramijó. La intervención sorprendió a las estructuras criminales que operaban silenciosamente.
El departamento de comunicación de las Fuerzas Armadas destacó el impacto de la acción. La remoción de las cámaras representa un avance significativo en la lucha contra el crimen. Los dispositivos permitían a los delincuentes anticipar movimientos policiales. Su eliminación debilita las operaciones de grupos al margen de la ley. Con esto Jaramijó recupera espacios públicos tras esta operación.
Los residentes expresaron alivio ante la intervención militar en el cantón. La presencia de cámaras clandestinas generaba temor entre los ciudadanos. Los comerciantes locales denunciaban vigilancia constante por parte de delincuentes. Con esta operación las autoridades buscan reducir los índices delictivos en Manabí.
El trabajo investigativo fue clave para desmantelar las cámaras
La operación requirió un trabajo de inteligencia previo para localizar las cámaras. Los militares identificaron sectores estratégicos usados por los grupos criminales. Las Fuerzas Armadas coordinaron con otras instituciones para garantizar el éxito del operativo. Los dispositivos retirados serán analizados para rastrear a los responsables. La información obtenida podría desmantelar redes más amplias, se aseguró.
Manabí enfrenta desafíos crecientes por la actividad de bandas delictivas. Las cámaras clandestinas facilitan delitos como el narcotráfico y la extorsión. Los ciudadanos exigen más controles para proteger sus comunidades. La Fuerza de Tarea Conjunta intensificará las acciones en zonas vulnerables.
Los funcionarios aseguran que las operaciones continuarán en toda la provincia. La colaboración entre militares y policías fortalece la seguridad pública. Los vecinos piden patrullajes permanentes para evitar el regreso de los delincuentes. La eliminación de las cámaras envía un mensaje firme contra el crimen. Jaramijó espera recuperar la tranquilidad perdida.
Las Fuerzas Armadas exhortaron a la ciudadanía a denunciar actividades sospechosas. La cooperación comunitaria es clave para prevenir delitos, afirmaron. Este operativo demuestra el compromiso con la seguridad de Manabí. Los residentes confían en que las acciones reduzcan la delincuencia.