Un grupo de músicos cubanos ha acercado los ritmos latinos al público kazajo con la fusión de la música de ambos países, que ha traído una gran popularidad a los artistas isleños en su tierra de acogida.
“La música es un arte, no tiene fronteras y debe ser comprensible para cualquier persona”, señaló a Efe Efraín Yohandy Fuentes Villalonga, fundador del grupo Sin-Frontera, y más conocido como YOY.
ACTIVA LABOR PESE A LA PANDEMIA. La pandemia y las restricciones impuestas al sector de ocio y cultura repercutieron seriamente en las actividades del grupo, que no obstante está decidido a continuar sus actividades en Kazajistán y tiene la mente puesta en nuevos proyectos.
“Vamos a seguir haciendo música, fusionar géneros y estilos y promover la música latina”, promete YOY, quien adelanta que el grupo tiene planes de “hacer un disco completamente en español”.
La canción que abrirá el nuevo álbum se titula “My Darling” y fue grabada con el nuevo integrante del grupo Yosmel Reyes Cardonell, que se unió a Sin-Fontera durante la pandemia.
“La canción es un 90 % en español y solo en el coro tiene una frase en inglés”, explica YOY, quien dice tener “mucha fe” en la nueva pieza musical.
El músico se muestra además orgulloso de la aportación de la banda a la popularidad de la música latina en Kazajistán, el mayor país de Asia Central, donde en los últimos años se inauguraron varias escuelas de bailes latinos y cursos de español.
EL ÉXITO QUE ENCUMBRÓ AL GRUPO CUBANO. La popularidad de Sin-Frontera en Kazajistán llegó en 2014 de la mano del vertiginoso éxito de la canción “Aspanga Karaimyn” (“Miro al cielo y veo las estrellas”), interpretada por los artistas cubanos junto con el autor y compositor del tema, Abai Begey.
“Aspanga Karaimyn”, que cobró fama nacional, se mantuvo durante dos años en las listas de las canciones más escuchadas de Kazajistán y sigue entre las favoritas del público.
Según YOY, fue precisamente la simbiosis entre las letras kazajas y los ritmos latinos la que caló hondo en los corazones de los melómanos locales e hizo que los artistas cubanos continuaran creando nuevos éxitos en colaboración con sus colegas kazajos.
Así, después de triunfar con “Aspanga Karaimyn”, Sin-Frontera grabó junto con Begey el tema “La Ra Ri”, y también colaboró con artistas contemporáneos y estrellas de la época soviética para crear otras composiciones.
Los músicos cubanos dieron además una segunda vida al conocido tema Kaidasin (¿Dónde estás?) del conjunto musical soviético Dos Mukasan, fundado en Kazajistán en el lejano 1967.
Pero su segundo mayor éxito en este país fue “Omirim aikyn”, que arrasó durante la Expo Astaná 2017 y tiene casi 6 millones de visualizaciones en YouTube.
MÁS ALLÁ DE KAZAJISTÁN. El fundador de Sin-Frontera, que integran también Rodyn Alberto Fernández Martínez y Omar Arango Torres, asegura que el éxito de “Aspanga Karaimyn” traspasó fronteras y llegó a resonar hasta en su Cuba natal.
“No ha dejado indiferente a nadie, ni siquiera en Cuba”, dice el músico.
De acuerdo con el cantante kazajo Aikyn Tolepbergen, coautor de varios temas junto con los miembros de Sin-Frontera, el éxito de los músicos cubanos en el país centroasiático se debe no solo al amor de los kazajos por la música, sino también a la capacidad de los isleños de cantar en kazajo.
“Los kazajos lo valoran mucho”, asegura.
SEGUNDA CASA PARA LOS CUBANOS. YOY llegó a Kazajistán, donde la comunidad cubana suma un centenar de miembros, hace más de diez años.
“Llegamos al país en 2009 por un contrato de trabajo para un club latino muy popular que había aquí en ese momento”, rememora.
Al principio, el músico no dominaba el kazajo, ni tampoco el ruso, pero en poco tiempo comenzó a desenvolverse en su nuevo entorno.
“Los kazajos son un pueblo muy hospitalario, siempre te llaman a casa y te presentan a su familia. Y en eso se parecen a los latinoamericanos”, asegura.
El éxito de Sin-Frontera animó además a más artistas cubanos a viajar a Kazajistán, como es el caso de Nelson Serrano Bassalo, que actualmente vive y trabaja en Nur-Sultán.
Según dijo a Efe, se siente muy a gusto en la capital kazaja pese al frío intenso tan habitual para estos lares.
En Nur-Sultán el emigrante cubano creó un dúo con la cantante local Akmaral Nurlanova y compagina su trabajo artístico con el de profesor de español.