Los transportistas de Ecuador llaman al Gobierno a actuar de inmediato frente al aumento alarmante de la inseguridad en carreteras. Solicitan medidas urgentes para proteger a conductores y pasajeros, mientras la violencia genera preocupación en miles de familias. La situación amenaza no solo la seguridad, sino también la estabilidad del sector económico.
En NotiMundo Estelar, Juan Carlos Andrade, presidente de la Cámara Ecuatoriana de Empresas de Transporte de Carga y Logística, destacó que la situación se ha intensificado de forma alarmante. La falta de protocolos claros pone en riesgo a los trabajadores y genera incertidumbre sobre la eficiencia de la seguridad pública.
Extorsiones y robos golpean a los choferes en Guayaquil
El dirigente señaló que, en ciudades como Guayaquil, los choferes han sido víctimas de extorsiones y amenazas por parte de grupos delictivos. Solo en lo que va de septiembre, se han registrado múltiples casos de robos y asesinatos, provocando protestas y un clamor generalizado por mayor protección.
Andrade enfatizó que la violencia impacta directamente en la actividad económica, afectando la confianza de las empresas y la seguridad de los pasajeros. La inseguridad en las carreteras se convierte así en un problema social y económico simultáneamente.
El transporte de carga: un pilar de la economía ecuatoriana
El presidente de la Cámara subrayó que el transporte de carga pesada es un sector estratégico para la economía ecuatoriana, aportando cerca del 6 % al PIB. Actualmente, más de 6.000 empresas operan en esta actividad, generando alrededor de 400.000 empleos directos.
La inseguridad no solo afecta a los trabajadores, sino que también amenaza a miles de familias que dependen de los ingresos del sector. Andrade advierte que la falta de protección podría debilitar el desarrollo económico del país si no se toman medidas.
Combatiendo la informalidad y la competencia desleal
El dirigente también enfatizó la necesidad de establecer una regulación eficiente para combatir la informalidad en el transporte. Señaló que muchas compañías operan sin declarar ingresos, generando competencia desleal y perjudicando a quienes cumplen con la normativa vigente.
Entre las propuestas presentadas por Andrade destaca la implementación de medidas concretas para fortalecer la seguridad, incluyendo protocolos claros de actuación frente a delitos en las vías. Sugirió que los asaltos y robos a transportistas sean considerados atentados contra la seguridad nacional, garantizando atención judicial inmediata.
Transportistas de Ecuador: cooperación con el Gobierno y uso de tecnología avanzada
Asimismo, destacó que el sector participa activamente en mesas de trabajo con el Gobierno para abordar no solo la inseguridad, sino también otros desafíos que enfrenta el transporte. Sin embargo, insistió en la necesidad de actuar con rapidez y eficacia.
Finalmente, Andrade abogó por el uso de tecnología avanzada, como drones y sistemas de monitoreo, para mejorar la prevención y la reacción frente a incidentes delictivos. Según el presidente de la Cámara, esta modernización es clave para enfrentar los nuevos retos que impone el crimen organizado y garantizar la seguridad de los trabajadores del sector.