Para diciembre de 2025, está previsto que en Portoviejo se inaugure el primer laboratorio Food Tech del país, un proyecto impulsado por el municipio de este cantón. La iniciativa propone capacitar a emprendedores gastronómicos en técnicas innovadoras como impresión 3D de alimentos y cultivos hidropónicos, explicó Reyner Gonzáles, director del Centro de Emprendimiento Tecnológico e Innovación (CETI).

El proyecto Food Tech, aprobado con un presupuesto municipal tras un proceso de planificación, busca posicionar a Portoviejo como un referente en innovación gastronómica en el país, aseguró Reyner Gonzáles, director del Centro de Emprendimiento Tecnológico e Innovación (CETI).

González dijo que la iniciativa surge tras el reconocimiento que entregó la UNESCO a Portoviejo, como Ciudad Creativa. “Este reconocimiento destacó a la ciudad por su riqueza culinaria y potencial creativo. El laboratorio, cuya construcción está en fase de contratación pública, ofrecerá becas a emprendedores locales para formarlos en tecnologías aplicadas a la gastronomía”, indicó el funcionario.

Tecnología al servicio de la cocina en Portoviejo

El Food Tech abarca toda la cadena de producción alimentaria, desde el cultivo hasta la mesa. En la etapa de producción, se implementarán huertos hidropónicos verticales inteligentes, equipados con sensores que monitorean la calidad del agua y optimizan el uso de recursos, garantizando materias primas de alta calidad, detalló González. Este sistema, que maximiza el espacio al cultivar en altura, reduce el impacto ambiental y mejora la eficiencia, añadió el funcionario.  

En el procesamiento y presentación de alimentos, el laboratorio introducirá impresión 3D de alimentos, una tecnología que permite crear desde proteínas vegetales con texturas similares a la carne hasta postres personalizados como chocolates y pasteles. Además, se explorará la gastronomía molecular, que transforma ingredientes en formas innovadoras, como esferas comestibles que conservan sabores y nutrientes, inspirada en experiencias de restaurantes como Frenesí en Argentina, señaló el director del CETI. .

Portoviejo: Un modelo pionero en la región

Según González, Portoviejo será la primera ciudad de Ecuador en implementar un proyecto de esta magnitud. No obstante, se tomaron como referencia iniciativas similares en Loja, Ecuador, y Madrid, España, reconocida como cuna de la innovación gastronómica. El laboratorio no solo formará a cocineros, sino que también involucrará a agricultores locales para integrar tecnología en la producción de insumos, fortaleciendo la economía local.

El proyecto incluye un espacio inmersivo donde los comensales experimentarán con todos sus sentidos. Por ejemplo, las paredes del laboratorio proyectarán entornos temáticos, como un fondo oceánico para menús de mariscos, mejorando la experiencia gastronómica. Esta tecnología, combinada con la trazabilidad innovadora de los alimentos, asegura que cada etapa, desde la siembra hasta el empaque, cumpla con estándares de calidad y sostenibilidad, recalcó el funcionario. 

Impacto en emprendedores y comunidad

El Food Tech capacitará a emprendedores gastronómicos para que adopten herramientas digitales y técnicas avanzadas, permitiéndoles competir en un mercado global. Las autoridades municipales, esperan que el laboratorio genere empleos directos e indirectos, impulsando el turismo gastronómico en Portoviejo. Además, al promover cultivos sostenibles y reducir el desperdicio, el proyecto alinea la gastronomía local con los objetivos de desarrollo sostenible, indicó González..

El proceso de compras públicas está en marcha, y las autoridades confían en que el laboratorio estará operativo antes de finalizar 2025. Aunque no se han revelado detalles sobre el número exacto de becas o la capacidad del laboratorio, se espera que el proyecto beneficie a decenas de emprendedores en su primera fase.

Contexto de la gastronomía innovadora

La designación de Portoviejo como Ciudad Gastronómica Creativa por UNESCO responde a su diversidad culinaria, que combina tradiciones indígenas y modernas. La tendencia global hacia la tecnología alimentaria (Food Tech) incluye avances como la impresión 3D y la agricultura vertical, que buscan enfrentar desafíos como el cambio climático y la seguridad alimentaria. En América Latina, países como Argentina y Brasil ya experimentan con estas tecnologías, pero Portoviejo se perfila como pionera en integrarlas en un proyecto municipal.