El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) advirtió este viernes que el nuevo plan humanitario para la Franja de Gaza, impulsado por Israel y Estados Unidos, fuerza a la población palestina a elegir entre «desplazamiento y muerte».
La organización dice que ese plan limitaría la ayuda a 60 camiones diarios y obligaría a los civiles a recoger alimentos en zonas militarizadas. La declaración, emitida desde Ginebra, responde a la crisis agravada por el bloqueo israelí, que ha dejado sin alimentos a 170 comedores comunitarios.
Las críticas de UNICEF
El plan, del que se conocen pocos detalles, contempla centros de distribución de ayuda vigilados por contratistas privados y rodeados de militares israelíes. Según James Elder, portavoz de UNICEF, los 60 camiones diarios representan apenas una décima parte de los cargamentos que ingresaban durante el último alto el fuego entre Israel y Hamás. «No son ni de lejos suficientes para más de un millón de niños y dos millones de personas», afirmó, exigiendo el levantamiento del bloqueo para permitir la entrada masiva de ayuda humanitaria.
Elder señaló que el plan vulnera principios humanitarios básicos al usar la alimentación como «táctica de presión». «Pedir a civiles que entren en zonas militarizadas para recoger ayuda es inaceptable», añadió, subrayando que la comida nunca debe ser una moneda de cambio.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) respaldó esta crítica. Su portavoz, Margaret Harris, afirmó que el sistema de reparto de ayuda en Gaza funciona «de punta a punta», desmintiendo alegaciones sobre secuestros de suministros por parte de Hamás. «El problema no es el reparto, sino que no se permite entrar la ayuda», dijo Harris.
Crisis de alimentaria
El bloqueo israelí ha generado una crisis alimentaria severa. Unos 170 comedores comunitarios en Gaza han cerrado por falta de alimentos, afectando a miles de familias. Huda Abu Diyya, una madre desplazada en Jan Yunis, relató que el comedor local sirvió sus últimas raciones el jueves, dejándola sin opciones para alimentar a sus hijos.
Por su parte, el embajador de EE.UU. en Israel, Mike Huckabee, defendió el plan, argumentando que busca evitar que milicias palestinas intercepten la ayuda. Sin embargo, las críticas de UNICEF y la OMS destacan la insuficiencia del enfoque y el riesgo que representa para los civiles.
La Franja de Gaza enfrenta una crisis humanitaria desde el recrudecimiento del conflicto entre Israel y Hamás. El bloqueo total impuesto por Israel ha restringido el acceso a alimentos, medicinas y combustible, afectando a más de dos millones de personas, de las cuales la mitad son niños. Las agencias de la ONU han solicitado repetidamente un alto el fuego y la apertura de corredores humanitarios para aliviar la situación. (10)