El incendio en un comisariato es investigado por bomberos y la Policía para determinar si fue provocado o no.
Era la 1h00 de la madrugada del jueves cuando los vecinos del barrio Santa Ana escucharon una explosión, y después vieron que las llamas envolvían el local “Legumbres y frutas distribuidora”.
Las llamas se extendieron y alcanzaron a un local contiguo. Vecinos llamaron a miembros del Cuerpo de Bomberos.
También hicieron videos del flagelo, cuyas llamas medían cerca de cinco metros.
Enseguida la sirena de los bomberos despertó al resto del vecindario, porque llegaron al sitio para apagar el flagelo.
Julio Roca, jefe del Cuerpo de Bomberos, manifestó que como primera hipótesis se maneja que el incendio se habría originado por un cortocircuito en la conexión eléctrica que proviene desde el poste.
Debido a que en el lugar había almacenado cartón, plástico, y algunas de sus paredes eran de gypsum, que son materiales de fácil combustión, el fuego se propagó con rapidez, dijo Roca.
Finalmente lograron apagar las llamas.
Ayer por la mañana, personal del Cuerpo de Bomberos llegó al local para hacer una nueva investigación y determinar el origen del incendio.
Sin embargo, cuando llegaron el lugar había sido limpiado por su dueño. Se habían removido todas las cosas.
Roca indicó que posterior a un incendio es importante no manipular la escena; con las líneas de fuego y el análisis de las conexiones eléctricas se podría hacer un informe y determinar las causas del flagelo.
Investigan si “vacunadores” provocaron el incendio en comisariato
Quien también investiga la causa del incendio es la Policía.
Esto porque existen reportes de amenazas contra este local hechas por extorsionadores que se dedican al delito de cobro de “vacunas”, un delito en el que se exige dinero para no atentar contra personas o establecimientos.
La Policía informó que a la misma hora del incendio tuvieron reportes de disparos por el lugar.
Estos habrían sido dirigidos a la puerta de un local cercano a donde hubo el incendio.
El delito de extorsión, conocido como “vacunas”, se instaló en el distrito de Manta, Montecristi y Jaramijó hace tres años.
Fue en el 2023 cuando tomó más fuerza, según reportes policiales.
Estos son cometidos por personas vinculadas a bandas delincuenciales. El dinero es usado para financiar a las bandas.