La Mariscal se llenará de música, danza y color con el desfile “Los diablos se toman La Mariscal”, fortaleciendo la tradición y la cultura ancestral de Quito.
La ciudad capital será escenario de “Los diablos se toman La Mariscal”, un desfile cultural que comenzará a las 17h30 en la avenida Amazonas y Jorge Washington, frente a la plaza de Los Presidentes, y concluirá en la plaza El Quinde, en la intersección de Mariscal Foch y Reina Victoria. Participarán diabladas emblemáticas del país, como las de Píllaro, Hojalata, Alangasí, Cotocollao y Diablos Quiteños, en un homenaje a la herencia ancestral y la memoria cultural de Quito.
Un desfile lleno de tradición
Al ritmo de bandas tradicionales, los participantes recorrerán las calles de La Mariscal con trajes coloridos y danzas que representan la resistencia indígena frente a la conquista española.
La Diablada de Píllaro, de Tungurahua, y los Diablos de Hojalata, de Chimborazo, estarán entre los principales protagonistas. Estas agrupaciones conservan prácticas ancestrales que combinan rituales de protesta y expresiones festivas de la cultura local.
Los asistentes podrán disfrutar de la Diablada de Alangasí, los Diablos Quiteños y los Diablos Floridos de Cotocollao, que resaltan por su vestimenta elaborada y coreografías únicas.
Reactivación de La Mariscal
El evento forma parte del plan de reactivación de La Mariscal. Es impulsado por el Municipio de Quito y busca revitalizar la zona mediante iniciativas culturales, espacios comerciales y actividades ciudadanas.
La ordenanza municipal promueve la inversión y facilita la organización de eventos, con el objetivo de atraer a turistas y residentes a recorrer sus calles y participar en actividades culturales.
Con estas acciones, La Mariscal se posiciona como un centro de convivencia, cultura y entretenimiento, fortaleciendo la economía local y la identidad urbana.
Significado cultural de la Diablada
La Diablada es mucho más que un desfile; simboliza la resistencia indígena frente a la opresión durante la conquista española. Además, se vincula a celebraciones religiosas como la Semana Santa y el Pase del Niño, especialmente en comunidades como Alangasí y Riobamba.
El uso de máscaras, trajes y danzas refleja siglos de tradición y memoria social. Esta práctica permite mantener vivas las costumbres y transmitir valores culturales a nuevas generaciones.
La actividad fortalece el sentido de identidad de los ciudadanos y resalta la diversidad cultural del país.
Quito: alcalde Muñoz responsabiliza al Gobierno Nacional por debate sobre tarifas de transporte
Desfile cultural Quito: una fiesta para toda la ciudadanía
El desfile está abierto al público y se espera la participación de miles de personas, incluyendo familias, turistas y amantes de la cultura. Los asistentes podrán recorrer el trayecto desde plaza de Los Presidentes hasta plaza El Quinde, disfrutando de música, danza y exhibiciones artísticas.
Los organizadores recomiendan llegar con anticipación y respetar las normas de seguridad para garantizar la fluidez del evento y el disfrute de todos los participantes.
Además, la actividad servirá como plataforma para que otras expresiones culturales y comerciales se integren al recorrido. Para con ello dinamizar el comercio local y ofreciendo una experiencia completa a los visitantes.